Este fenómeno es debido a múltiples circunstancias:
- Embarazo y lactancia
- Envejecimiento
- Hipertrofia e hiperplasia mamaria
- Obesidad o grandes variaciones de peso
Aunque la estabilidad y la suspensión de la mama dependen teóricamente de varios factores internos como el tipo de glándula, el tejido colágeno de sostén y los ligamentos internos, en realidad y en la práctica, la efectividad de estos mecanismos es mínima y es a la piel a la que debemos atribuirle el máximo protagonismo como elemento suspensorio de la mama.
En la ptosis, la piel se alargará de modo progresivo tanto en la zona superior como en la inferior y el tejido glandular tenderá a acumularse en los cuadrantes inferiores de la mama, vaciándose el polo superior.
La elevación y reafirmación del pecho caído se consigue mediante un procedimiento quirúrgico denominado mastopexia o elevación de pechos. Dependiendo del tipo y grado de ptosis, existen varias técnicas de mastopexia.